Enviado por FMLN Vancouver
Palabras de Alex Ochoa, en representación de estudiantes salvadoreños en la Escuela latinoamericana de Medicina – ELAM, Cuba, con motivo de la visita del vicepresidente de la República Salvador Sánchez Cerén.
4 de diciembre de 2009.
Hoy es un día grande para nosotros porque con la visita de nuestro vicepresidente se reafirma una vez más que el pueblo cubano y salvadoreño son hermanos, nunca más nuestros pueblos estarán separados por una imaginaria barrera de diplomacia.
También es un día grande para nosotros porque todos los sueños de cambio para nuestro país se están cumpliendo.
Nosotros como salvadoreños y simpatizantes del FMLN nos sentimos orgullosos por la presencia de nuestro compañero que es una muestra del apoyo, de la fe y de la esperanza que tienen nuestros gobernantes al enviarnos a Cuba a formarnos como médicos de ciencia y conciencia para regresar a nuestras comunidades y demostrar con hechos un cambio profundo en el sistema de salud de El Salvador y en la sociedad de El Salvador es posible y es urgente.
La solidaridad que ha unido históricamente a los pueblos cubano y salvadoreño, se demuestra en nosotros que vinimos de un país donde se nos había negado el derecho a estudiar solo por no cumplir con un estatus económico y venimos a esta revolución porque creemos que un mundo mejor es posible y que nosotros podemos ayudar a construirlo.
Tal vez nosotros, las generaciones jóvenes, no podemos contar con el conocimiento que da la vida, como lo tiene el compañero Leonel, acerca del pasado de lucha que ha tenido nuestro pueblo, pero una cosas sí que las conocemos y es necesario hablar de ellas.
El Salvador vivió sumido por más de setenta años en una sucesión de dictaduras, poco tiempo de descanso tuvo, pero contrario a los que muchos piensan nunca el pueblo salvadoreño estuvo tranquilo y durante esos setenta años y más la historia de nuestro país se ha construido gracias a la lucha de nuestros hermanos, nuestros padres y nuestros familiares.
De esta tradición de lucha es que surgió el FMLN y todos sabemos la labor fundamental que ha tenido a la hora de impulsar los cambios de nuestro país, siempre como motor fundamental impulsados por todos y todas las salvadoreñas que soñamos con ver un mundo mejor y más humano.
El FMLN siempre ha seguido los principios de sacrificio, de hermandad, de solidaridad de internacionalismo y sobre todo y algo que nunca ha perdido, es la brújula de ser un partido revolucionario; es esta idea en la cual nos nutrimos hoy, ya que como sabemos el apoyo de la revolución cubana nunca ha dejado a El Salvador desamparado, desde antes de los tiempos de la guerra esta revolución siempre tendió su mano amiga al pueblo salvadoreño con su apoyo médico, su apoyo al darnos beca para estudiar y así mucho mas, sin importar que los gobiernos de turno no quisieran reconocer la obra y la legitimidad de esta obra de amor, llamada revolución cubana y es así que Cuba demuestra su solidaridad y su internacionalismo sin límites al atender y ayudar a un pueblo hermano más allá de las barreras virtuales de la diplomacia, porque la solidaridad, el internacionalismo y la revolución no tiene límites.
Es por todo esto que nosotros como salvadoreños tenemos una deuda histórica con esta Isla querida y hoy con la visita de nuestro vicepresidente, un vicepresidente del FMLN, empezamos a saldar esa deuda histórica de amor y solidaridad y no es casualidad que nuestro nuevo gobierno sea del FMLN; los cambios en América Latina se están viendo como dijo el Che “ esta humanidad ha dicho basta y ha echado andar y su marcha de gigante no se detendrá “Así ha despertado el pueblo salvadoreño y los cambios que han empezado ya no se detendrán.
Aquí es donde entra nuestro papel como futuros médicos, entra al formarnos bajo la sombra y el cuidado de nuestra revolución cubana, no podemos dejar pasar las cosas y mantenernos indiferentes, es nuestro deber como salvadoreños y revolucionarios (si lo queremos ser) apoyar día a día el cambio social que vive nuestro país, nuestra trinchera es la medicina, desde esta noble profesión impulsaremos todos los cambios que soñamos, ese es nuestro compromiso y desde ya tratamos de realizarlo; prueba de ello son los proyectos BES, en los que dedicamos una semana de nuestra vacación a realizar trabajo comunitario en una comunidad con el único fin de empezar a sembrar la medicina del cambio que queremos realizar. Y es muy grato para nosotros en este momento poder darles las gracias al señor vicepresidente, ya que gracias a su apoyo, el de su esposa y su equipo de trabajo, este año pudimos realizar los proyectos BES y profundizar su impacto gracias a una donación de medicamentos que nos hicieron de parte de su oficina, gracias vicepresidente.
Son estas cosas las que nos llenan de esperanza, las que nos dicen que tenemos un partido que nos apoya y ahora un gobierno que nos apoya en nuestra labor de transformar el sistema de salud; estas son las cosas que nos dicen que podemos salir adelante si todos trabajamos juntos, una vez más gracias señor vicepresidente.
Solo nos queda reiterarle nuestro compromiso, nosotros todos a los salvadoreños venimos acá con un solo ideal regresar a nuestro país, ayudar y trabajar por el cambio social en nuestro país y ese ideal no lo perderemos, se lo debemos a la revolución cubana, por darnos la oportunidad de formarnos en su tierra, al FMLN por todos los que lucharon porque jóvenes como nosotros tuviéramos esta oportunidad y no tuviéramos que morir bajo el fuego de la represión salvadoreña y sobre todo se lo debemos al pueblo salvadoreño del que somos hijo y del que tanto nos necesita.
Que viva el FMLN!
Que viva la revolución Cubana!
Que viva El Salvador!
Alex Ochoa.
Palabras de Alex Ochoa, en representación de estudiantes salvadoreños en la Escuela latinoamericana de Medicina – ELAM, Cuba, con motivo de la visita del vicepresidente de la República Salvador Sánchez Cerén.
4 de diciembre de 2009.
Hoy es un día grande para nosotros porque con la visita de nuestro vicepresidente se reafirma una vez más que el pueblo cubano y salvadoreño son hermanos, nunca más nuestros pueblos estarán separados por una imaginaria barrera de diplomacia.
También es un día grande para nosotros porque todos los sueños de cambio para nuestro país se están cumpliendo.
Nosotros como salvadoreños y simpatizantes del FMLN nos sentimos orgullosos por la presencia de nuestro compañero que es una muestra del apoyo, de la fe y de la esperanza que tienen nuestros gobernantes al enviarnos a Cuba a formarnos como médicos de ciencia y conciencia para regresar a nuestras comunidades y demostrar con hechos un cambio profundo en el sistema de salud de El Salvador y en la sociedad de El Salvador es posible y es urgente.
La solidaridad que ha unido históricamente a los pueblos cubano y salvadoreño, se demuestra en nosotros que vinimos de un país donde se nos había negado el derecho a estudiar solo por no cumplir con un estatus económico y venimos a esta revolución porque creemos que un mundo mejor es posible y que nosotros podemos ayudar a construirlo.
Tal vez nosotros, las generaciones jóvenes, no podemos contar con el conocimiento que da la vida, como lo tiene el compañero Leonel, acerca del pasado de lucha que ha tenido nuestro pueblo, pero una cosas sí que las conocemos y es necesario hablar de ellas.
El Salvador vivió sumido por más de setenta años en una sucesión de dictaduras, poco tiempo de descanso tuvo, pero contrario a los que muchos piensan nunca el pueblo salvadoreño estuvo tranquilo y durante esos setenta años y más la historia de nuestro país se ha construido gracias a la lucha de nuestros hermanos, nuestros padres y nuestros familiares.
De esta tradición de lucha es que surgió el FMLN y todos sabemos la labor fundamental que ha tenido a la hora de impulsar los cambios de nuestro país, siempre como motor fundamental impulsados por todos y todas las salvadoreñas que soñamos con ver un mundo mejor y más humano.
El FMLN siempre ha seguido los principios de sacrificio, de hermandad, de solidaridad de internacionalismo y sobre todo y algo que nunca ha perdido, es la brújula de ser un partido revolucionario; es esta idea en la cual nos nutrimos hoy, ya que como sabemos el apoyo de la revolución cubana nunca ha dejado a El Salvador desamparado, desde antes de los tiempos de la guerra esta revolución siempre tendió su mano amiga al pueblo salvadoreño con su apoyo médico, su apoyo al darnos beca para estudiar y así mucho mas, sin importar que los gobiernos de turno no quisieran reconocer la obra y la legitimidad de esta obra de amor, llamada revolución cubana y es así que Cuba demuestra su solidaridad y su internacionalismo sin límites al atender y ayudar a un pueblo hermano más allá de las barreras virtuales de la diplomacia, porque la solidaridad, el internacionalismo y la revolución no tiene límites.
Es por todo esto que nosotros como salvadoreños tenemos una deuda histórica con esta Isla querida y hoy con la visita de nuestro vicepresidente, un vicepresidente del FMLN, empezamos a saldar esa deuda histórica de amor y solidaridad y no es casualidad que nuestro nuevo gobierno sea del FMLN; los cambios en América Latina se están viendo como dijo el Che “ esta humanidad ha dicho basta y ha echado andar y su marcha de gigante no se detendrá “Así ha despertado el pueblo salvadoreño y los cambios que han empezado ya no se detendrán.
Aquí es donde entra nuestro papel como futuros médicos, entra al formarnos bajo la sombra y el cuidado de nuestra revolución cubana, no podemos dejar pasar las cosas y mantenernos indiferentes, es nuestro deber como salvadoreños y revolucionarios (si lo queremos ser) apoyar día a día el cambio social que vive nuestro país, nuestra trinchera es la medicina, desde esta noble profesión impulsaremos todos los cambios que soñamos, ese es nuestro compromiso y desde ya tratamos de realizarlo; prueba de ello son los proyectos BES, en los que dedicamos una semana de nuestra vacación a realizar trabajo comunitario en una comunidad con el único fin de empezar a sembrar la medicina del cambio que queremos realizar. Y es muy grato para nosotros en este momento poder darles las gracias al señor vicepresidente, ya que gracias a su apoyo, el de su esposa y su equipo de trabajo, este año pudimos realizar los proyectos BES y profundizar su impacto gracias a una donación de medicamentos que nos hicieron de parte de su oficina, gracias vicepresidente.
Son estas cosas las que nos llenan de esperanza, las que nos dicen que tenemos un partido que nos apoya y ahora un gobierno que nos apoya en nuestra labor de transformar el sistema de salud; estas son las cosas que nos dicen que podemos salir adelante si todos trabajamos juntos, una vez más gracias señor vicepresidente.
Solo nos queda reiterarle nuestro compromiso, nosotros todos a los salvadoreños venimos acá con un solo ideal regresar a nuestro país, ayudar y trabajar por el cambio social en nuestro país y ese ideal no lo perderemos, se lo debemos a la revolución cubana, por darnos la oportunidad de formarnos en su tierra, al FMLN por todos los que lucharon porque jóvenes como nosotros tuviéramos esta oportunidad y no tuviéramos que morir bajo el fuego de la represión salvadoreña y sobre todo se lo debemos al pueblo salvadoreño del que somos hijo y del que tanto nos necesita.
Que viva el FMLN!
Que viva la revolución Cubana!
Que viva El Salvador!
Alex Ochoa.
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