Las medidas se intensificaron una vez este fue proclamado candidato a presidente por el FMLN y hasta se hicieron acciones de medición de fuerzas, luego que Mauricio Funes llenara el estadio Cuscatlán un 11 de noviembre (fecha en que incluso debió quedarse gente fuera que ya no cabía y que asistió de forma voluntaria y desinteresada); ARENA repitió la misma hazaña mediante el pago a gente pobre, amenaza de despido a empleados y hasta empleados obligados que tienen “puestos de confianza”, mandos medios y superiores de dependencias del estado; aun así, la asistencia fue menor.
Surgieron muchas otras estrategias de ataque, impulsada por la mayoría de medios de comunicación que siempre han sido aliados de la derecha y por organismos de capital dudoso que enarbolaron la bandera de ARENA y trataron por todos los medios de infundir terror en la población ante una derrota inminente, tratando de evitar que el pueblo votara por el FMLN; entre los medios de ataque que podemos recordar, están algunos desde los más agresivos hasta los más viles, tales como:
- Funcionarios de gobierno
- Medidas de presión a trabajadores de empresas privadas y dependencia del estado
- Organismos fantasmas como Fuerza Solidaria, Cruzada Pro Paz y Trabajo y Mujeres por El Salvador
- Influencia de iglesias evangélicas mediante pastores aliados a la ultraderecha influyendo en sus feligreses
- Acción de extranjeros como las cartas de Paolo Luers (por cierto con bastante lenguaje soez y vulgar), comentarios del venezolano Alejandro Peña Esclusa y otros
- La invitación de parte del gobierno a extranjeros que venían a hablar de las supuestas malas políticas en Venezuela, Nicaragua, las FARC y Cuba
- Ex guerrilleros o ex izquierdistas hoy aliados a la derecha, tales como los hermanos Galeas y Joaquín Villalobos
- Las actividades políticas partidaristas (violando la Constitución) del Presidente Saca
- Los canales de televisión, principalmente TCS y Canal 33; el día antes de las elecciones incluso el Canal 21 sacó un reportaje de Nicaragua y Canal 12 entrevistaba a políticos de derecha que, violando la ley, pedían el voto
- Los periódicos El Diario de Hoy, Periódico Más (el más ofensivo), Diario el Mundo y uno nuevo que apareció llamado Prensa Evangélica
- Muchos otros mecanismos
A medida que se acercaba el 15 de marzo, las encuestas, incluso las de derecha, manifestaban siempre un margen de superioridad del FMLN en intención de voto, superando en mucho el porcentaje al preguntar sobre confianza en el candidato y capacidad de gobernar; fue entonces que surgieron medidas para sumar votos y lograr un gane mediante el fraude, que hasta el momento siguen negando a pesar de las pruebas, entre estas medidas tenemos:
- Amenazas de despido a empleados públicos y privados
- Llamadas telefónicas hasta en el teléfino móvil y cartas de Ávila y Zablah a los empleados públicos (por correo del gobierno hasta la puerta de su casa, sin pagar, por supuesto)
- Duplicación de DUI`s
- Mecanismos para votar en lugar de los fallecidos presentes en el patrón electoral
- El uso de DUI fotocopiado
- El uso de tinta que se podía borrar (por cierto, en estos casos habían 60 buses en el Estadio Cuscatlán, la gente se dirigía a los centros de votación mediante líneas pintadas en el pavimento, pues eran de otros departamentos y no conocían, votaban, se quitaban la tinta y en los mismos autobuses los llevaban a sus lugares de origen a votar en la tarde
- La ya mencionada pintura en el asfalto de las calles que dirigían a los centros de votación
- La migración de extranjeros
- La negación de permisos para ir a votar en varias empresas
- La compra de voluntades y de partidos políticos (PCN, PDC y FDR) que no fueron apoyados por las bases
- Los convenios con alcaldes, siendo el más sonado el caso Will Salgado, que en lugar de exigir al candidato que mejoren las condiciones de vida de la población, exigió 4 obras de infraestructura
- Etc.
Lo que no consideró ARENA es la voluntad del pueblo, la vigilancia activa en las calles, las ciudades y las zonas fronterizas y otras actividades que lograron minimizar el impacto de tales medidas; al final se logró el anhelado triunfo, luego del cual la derecha se consuela diciendo que tienen el 50% de la población, no analizan que si disminuyen a su porcentaje de votos alcanzado los realizados por la gente a la que le pagaron, los votos de los extranjeros, los votos dobles y los votos de aquella gente que por miedo marcó la bandera arenera, probablemente tengan menos del 40% de votos válidos.
Una vez se consiguió la victoria, la gente salió a las calles, mucha gente que tuvo miedo y votó por ARENA se vistió de rojo y celebró, mucha gente que antes votaba por el partido en el gobierno esta vez cambió, fueron 5 o 6 cuadras llenas de gente en la zona del redondel Masferrer y si le sumáramos las concentraciones en todo el país, principalmente las grandes concentraciones en Santa Ana, San Miguel, Apopa, Mejicanos, Soyapango, Ilopango y otras, hubiera duplicado o triplicado aquella concentración inmensa de la Alameda Juan Pablo II.
Todo el país, incluidos los areneros, con lagrimas en sus ojos, escucharon el discurso de Mauricio Funes, un discurso de altura, de reconciliación, de mano tendida, de paz, de esperanza, esto hizo que todos aquellos que antes lo atacaban, rindieran un tributo de respeto al nuevo presidente.
El esperado mensaje de ARENA apareció bastante noche, un Rodrigo Ávila con voz quebrantada, pero con un mensaje distinto, aceptando la derrota y pidiendo bendiciones para su contrincante, un discurso como el que no está acostumbrado, sin titubeos, con voz serena, y sin ofensas, muy distinto al que dio cuando proclamó ganador a Norman Quijano.
Al día siguiente, la gente compraba hasta varias ediciones de los periódicos, los que fuimos más curiosos, esperábamos con ansias los editoriales y lo que dirían los periódicos ultraderechistas, principalmente El Diario de Hoy y el Periódico Más, (ambos de Altamirano), hubo gran sorpresa, hubo contenido de altura, de respeto al ganador, se quitaron las palabras de guerra, comunismo, terrorismo, se tuvo que alabar el discurso, se tuvo que rendir ante un mensaje de paz.
Luego el mensaje del Presidente Saca, aquel que siempre aseguró que le daría la banda presidencial al candidato de su partido, aquel arrogante que hizo campaña política acusando de aliado de las FARC al FMLN y a Mauricio Funes, aquel que ya en la semana previa a las elecciones hablaba distinto diciendo que respetaría la decisión del pueblo (parecía que sabía que aun con las maniobras mencionadas era difícil ganar). Su mensaje fue diferente, la felicitación al ganador fue de mucho respeto, le tocó alabar el sonado discurso, tuvo que aceptar la mano tendida de Funes y hablar de paz y de alternancia por primera vez.
Hoy vemos en los periódicos que aparecen todavía algunos artículos que, como dijo Will Salgado, “destilan veneno”, son pocos los que persisten, como los de aquel venezolano aliado al gobierno, los de Paolo Luers y los de aquel ex comandante guerrillero radicado en Inglaterra; sin embargo, hay artículos de paz, tales como el de Fabricio Altamirano hijo, de la ANEP, de políticos de derecha, de congresistas norteamericanos (que por cierto, vienen a reunirse con Funes, tal como el secretario adjunto de Estado de Estados Unidos para Asuntos Hemisféricos, Thomas Shannon), de empresarios que iniciarán inversiones millonarias en el país, de editorialistas de los periódicos de derecha (que han prometido escribir con la cabeza y no con el corazón), de religiosos que antes atacaron al nuevo presidente (y no me refiero a Tobi jr., quien todavía envía mensajes de desesperanza y fatalistas como que cuando dice, entre líneas, que esta victoria anuncia el fin del mundo).
Es tiempo de que los salvadoreños también actuemos distinto, que luchemos por las mayorías más pobres del país, que seamos solidarios con los que nos necesitan, que ayudemos en actividades de educación, que exijamos al gobierno central y locales que generen beneficios en las comunidades más desprotegidas, que exijamos nuestros derechos pero que también cumplamos con nuestros deberes, que luchemos siempre por la justicia y no defendamos al que debe pagar por cualquier causa, desde la más leve hasta la más grave, que trabajemos unidos por un mejor El Salvador, que nos quitemos ya las diferencias, que le demos la oportunidad al nuevo Presidente y evitemos hacer comparaciones con países de los que nos han hablado mal y no sabemos su realidad (puede que hasta estén mejores que nosotros), que pensemos que con nuestro esfuerzo y la ayuda de Dios, tendremos un mejor El salvador.
Adelante hermanos de Tonacatepeque aquí y en el extranjero, adelante salvadoreños, el desarrollo, el progreso y la paz de nuestra ciudad y de nuestro país, depende de todos!!!
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