Aumenta la delincuencia hacia transportistas

La renta obligatoria que las maras exigen a los empresarios de buses en El Salvador ha llegado a límites extremos, tal como la exigencia de $1,000.00 que extorsionistas hacen a los buseros de Soyapango.

Estas diferencias y la negativa de pago de parte de algunos empresarios, ha llevado a que se incrementen casos de asesinato en motoristas y cobradores, tal como recientemente hemos visto en Soyapango y Apopa.

Los periódicos de mayor circulación a veces omiten estos atropellos, para no dar mala imagen de las deficiencias de seguridad del gobierno, desde el día de ayer hay paro de buses de San Vicente, por el asesinato de algunos de sus compañeros motoristas e igual situación está sucediendo en la zona de Zacatecoluca.

El gobierno no ha tomado las medidas necesarias para frenar este tipo de delincuencia, ni ha magnificado las cantidades millonarias de dinero que mensualmente recogen las maras de las extorsiones a empresarios del transporte público; un estudio hecho en la zona de Soyapango revelaba que en una semana, eran varios miles de dólares, superando los $250 mil; si consideramos que las medidas tomadas para combatir a las maras son las manos dura y super mano dura, significa generar violencia contra la violencia. Cuando un ser humano se ve atacado y hasta con riesgo de muerte, busca las alternativas necesarias para sobrevivir; sin consideramos estas cantidades de dinero que las maras recogen y analizamos cual es el objetivo al que va dirigido este dinero, podemos pensar que:

1. Lo utilizan para alimentarse
2. Sirve para abastecerse de drogas
3. Les permite tener poder, para mantener zonas de control
4. La cantidad es suficiente para hacer contrabando de armas, tecnificarse, combatir a la policia y aumentar su capacidad de obtener dinero mediante el temor a la población

Esta última medida es una de las más probables, si analizamos la forma en que son asesinados los motoristas y cobradores, quienes al final cumplen con el dicho de "chucho más flaco", pues son ellos, y no los empresarios, quienes pagan y sufren cuando las maras desean cobrarse venganza .

Ya es tiempo de que se implementen medidas para eliminar las maras, pero estas no se deben combatir con fuego, pues se genera más violencia, deben buscarse las bases que generan aumento de integrantes de maras y que deben ser combatidas; lastimosamente al momento, estas son las áreas que el estado tiene deficitarias, tales como:

• Falta de empleo
• Falta de educación
• Pobreza
• Marginalidad
• Salud

El Ing. Rodrigo Avila no pudo combatir la delincuencia como Director de la PNC, han aumentado las extorsiones y ha seguido ciegamente las políticas que los respectivos presidentes de la república han implementado cada vez que ha dirigido dicha institución; esto nos lleva a la conclusión que no tiene ideas propias y eso es lo que ha llevado al fracaso en el combate a este flagelo; debemos pensar entonces, que de igual manera hará, si con fraude, llegara a ser presidente de la república.

Exijamos al gobierno que al fin tome medidas para combatir la delicuencia, las extorsiones, las maras y todo tipo de violencia; pidamos que haya evidencia de las medidas de seguridad implementadas para proteger a motoristas y cobradores del transporte público; quizá sería más importante lograr que los empresarios no paguen "renta", que pagarles subsidio y probablemente sea es la vía por la que pierden más estas empresas.

Ante la incapacidad del gobierno de turno para solucionar durante 20 años los males de nuestra población, ante el incremento del hambre, el desempleo, la falta de medicinas e insumos en hospitales y Unidades de Salud, ante la falta de educación, los constantes casos de corrupción, el aumento de la mortalidad infantil, el aumento de la pobreza y los bajos salarios, es tiempo que logremos la alternabilidad en el poder y votemos por personas honorables y de reconocida lucha abierta contra la injusticia social y con la verdad en sus labios, en el 2009 votemos por Mauricio Funes para presidente y luchemos contra el fraude electoral.